La relación que usted mantiene con su hijo es esencial para que las horas de comer sean felices y exitosas. El responder con receptividad al dar de comer a su niño significa que usted apoya a su hijo para que coma en forma independiente, que presta atención a la comunicación del pequeño, que responde oportunamente y que sigue adonde el niño o niña quiera ir. Como padre o madre, usted puede dar a su hijo unas oportunidades enriquecidas de aprender sobre la comida y evitar decidir a favor del niño qué come y cuánto. Al hacer esto, se puede tener menos estrés y más felicidad en las comidas.
Resultados de responder con receptividad durante las comidas…
- Se establece la confianza mutua
- Se pasa un rato juntos
- No hay presión
- Se fijan expectativas claras
- Se ofrecen Oportunidades, no se hacen demandas
- Se conversa sobre otras cosas que la comida
Ventajas para la familia
- Menos conflicto y estrés en la familia durante las comidas
- Se le enseña naturalmente al niño a controlar la cantidad que come
- Se fomentan las destrezas del niño de darse de comer y se mejora su desarrollo general
- Los niños pueden aprender a comer alimentos más variados
El niño
- Aprende durante la hora de comer
- Escoge cuál plato o alimento quiere comer
- Decide cuánto va a comer
Señales de hambre
- El niño indica que quiere comida
- Expresa entusiasmo sobre la comida
- Señala la comida con el dedo
Indicios de estar lleno
- El niño deja de comer
- Se vuelve a un lado
- Se aleja de la mesa o se baja de la silla
El padre o la madre
- Se sienta con el niño
- Proporciona un ambiente seguro y de apoyo
- Ofrece al menos uno o dos alimentos conocidos
- Explora la comida con su hijo
- Responde a los gestos, el lenguaje corporal y las palabras del niño
- Descubre qué le gusta al pequeño
- Fija rutinas predecibles y agradables para las comidas
Recuerde
- Los niños se comunican de maneras diferentes
- Las cosas se pueden ensuciar un poco pero ¡está bien!